

La obesidad es una enfermedad crónica degenerativa, incurable, su resolución no depende de la voluntad y está vinculada con más de 20 comorbilidades que conllevan a un riesgo médico muy grande de discapacidad o muerte prematura. Esta enfermedad ha alcanzado un porcentaje elevado a nivel mundial (se lo denomina pandemia). Cada año mueren como mínimo, 2.8 millones de personas a causa de la obesidad o sobrepeso.
Son múltiples los causales, por eso es tan difícil su tratamiento. Causas: relacionadas con la genética, desbalance energético, medio ambiental, predisposición hormonal, metabolismo basal bajo (ahorra energía ante cualquier tipo de actividad física que realiza), sedentarismo, la tecnología, alimentos chatarra, nuestra descendencia y cultura. Al comparar con un paciente de peso normal, la persona obesa tiene mayor absorción de calorías ante los mismos alimentos.
Utilizando el Índice de Masa Corporal (IMC) peso/altura2. A mayor IMC mayor probabilidades de padecer enfermedades relacionadas a la obesidad y tener una muerte temprana. Además el IMC nos sirve para poder ofrecer distintas alternativas terapéuticas. Los pacientes obesos tal vez tengan que gastar un 50% mas en cuidados médicos que los pacientes no obesos, y un 80% más en medicamentos.
Éxito en el tratamiento de la obesidad es perder mas del 50% de su exceso de peso (Peso actual – Peso Ideal) y ese descenso de peso mantenerlo por mas de 5 años.